Nuestro cerebro procesa 60.000 pensamientos al día y el 90% son repetidos. Es decir, sólo el 10% de todo lo que pasa por nuestra cabeza en un día es útil, nuevo y creativo. Practicar meditación es ejercitar nuestra mente para que no divague entre pasado y futuro, y se mantenga presente. Es la clave para acceder a todo nuestro potencial personal y profesional. Es, por tanto, el entrenamiento más adecuado para mejorar la atención y aumentar la productividad.

El estrés y la ansiedad no sólo provocan la inmensa mayoría de las bajas por enfermedad hoy en día, sino que nos impiden pensar y actuar correctamente, bloquean nuestra capacidad creativa y nos incapacitan para hacer frente a los continuos desafíos. Son la gran epidemia de nuestro siglo, cuestan billones de euros a las empresas y, sobre todo, millones de vidas. Y el antídoto, avalado por miles de estudios científicos de los centros y Universidades más prestigiosos del mundo, es la práctica de la meditación y la atención plena (Mindfulness).

Las compañías que incorporan programas de mindfulness reducen en un 78% las bajas por ansiedad, estrés o depresión mientras aumentan su productividad en un 20%, asegura un estudio de Adecco. La meditación es una apuesta segura para dar un impulso importante a la compañía mientras se contribuye a mejorar notablemente la calidad de vida de las personas que la integran.

Fuente:
Úrsula Calvo, CEO – Úrsula Calvo Center
OBSERVATORIO RH – observatoriorh.com